
Una manera de hacer
En el método Schinca la espectacularidad está en el interior.
El profesor enseña una técnica, descubre unos recursos físicos y desaparece trasmitiendo las claves que impulsan al alumno a la búsqueda de su imaginario.
De la mano de Marta ves lo oculto, lo imperceptible, los mecanismos sutiles de relación, te ayuda a valorar el detalle, cada parte del cuerpo adquiere vida y se convierte en imagen y emoción. Rompiendo con el concepto ideal de perfección, todo cuerpo que transmite adquiere una profunda belleza.